Una vez más el mes ha sido amplio en realizaciones acabadas y sorprendente en cuanto a calidades y temas.
Uno de los objetivos principales de esta Academia ha sido de siempre respetar las diferentes individualidades que la forman: aprendemos juntos, el profesor, es decir: yo, os acompaño en un viaje de iniciación y posterior profundización en este difícil mundo de la creación artística. Me llena de orgullo cuando veo que las obras acabadas responden sobre todo a esa premisa que identifica un «estilo» con su autor y que el resultado, además, no ofrece ninguna duda acerca de su calidad técnica. Es el caso de la ultima obra que José Luis Mendoza realizó en nuestro Estudio de Arte: color y limpieza de color, orden y minuciosidad, perfil y contraste y sobre todo un homenaje al optimismo son las características generales de sus obras desde que hace unos años comenzó a dar sus primeras pinceladas. Su obra «Nenúfares II» es claro ejemplo de esa síntesis.
Nenúfares II
No lleva mucho tiempo todavía con nosotros, y como todos los que en su día empezamos este camino, probamos y volamos picoteando un poco de todo: andamos y desandamos, vamos y venimos…buscamos. José Angel Pérez Meiro acaba de realizar uno de los que creo es de sus mejores obras hasta el momento; no tanto por su dificultad técnica, ha hecho obras más complejas, sino por tratarse de una obra compensada: color, composición, materia y sensaciones transmitidas creo que marcan un interesante inicio de un proyecto plástico: sé que irá y vendrá de nuevo, pero este cuadro deja esa marca en el camino que te permite regresar cuando no encuentras salida.
Viñas doradas
Una foto tomada por casualidad en un almacén de Antigüedades de un amigo, le ha servido a Raimundo José Toledo para realizar este bodegón con libros y pluma (aunque está por ver si el término «bodegón» es el adecuado, o sería más propicio el de «naturalezas muertas»…o ninguno, simplemente: «libros»). Ray tiene paciencia, es detallista y meticuloso, nunca se rinde, eso le beneficia, pero es que además va consiguiendo poco a poco, acaba de comenzar en este difícil mundo de la pintura, una técnica que le va ha permitir en un futuro muy próximo, a poco que le acompañe una cierta dosis de creatividad, abarcar obras más ambiciosas e importantes.
«Libros»
Si los tres cuadros mostrados hasta ahora nos mostraban mayor o menor grado de realismo, en los tres siguientes nos encontramos ante tres propuestas diferentes de abstracción de realidades paisajistas: Berta Erruz, basándose en un paisaje, en el que las parcelas se disponen en terrazas, ya de por sí nos muestra una de esas composiciones en las que la propia naturaleza, ligeramente manipulada por la intervención humana, nos permite trabajar nuestra obra desde unos principios mucho más libres y abstractos. La obra de Berta es prácticamente una obra bicolor: dos grandes manchas se abrazan en diagonal en el centro, la verde desde la zona inferior y la magenta que acapara la parte superior. La ventaja de actuar con estos dos colores es que nos permite un muy amplio abanico de tonalidades y variaciones en ambos: los verdes desde el más azulado al más amarillento, y los magentas desde los más rojizos a los más azulados, creando un gran atractivo cromático.
Berta Erruz «Sin título»
Mucho más abstracto y de libre interpretación es la obra de Adriana Sanz, artista que recupera sus realizaciones más expresivas. Negro, ocre y azul real hacen vibrar una composición que enfrenta dos zonas: la superior, más aguerrida, violenta y matérica, frente a una inferior mucho más tranquila y transparente.
«Ocre, negro y azul real»
La tercera de estas obras juega con una abstracción que combina la intencionalidad del artista, que combina colores y compone e interpreta la realidad, y los medios informáticos que elabora la imagen resultante en la que se basará posteriormente nuevamente el artista, quizá en esta ocasión más convertido en artesano. Mª del Carmen Bartolomé domina esta técnica desde hace ya bastantes años y ambos sabemos que los devaneos siempre son previos, en el proyecto, y que ahí está el momento de la creación y que luego…paciencia, buen hacer y mucha técnica para conseguir la vibración del color.
«Viña en azul y rosas»
Arantza Alonso Frutos ha iniciado con esta obra una serie que se basa en las diferentes composiciones formales y cromáticas que pueden dar unos objetos tan cotidianos como son los paraguas. Ya en dos obras anteriores había hecho uso de este objeto, pero son dos obras muy separadas en el tiempo y en las que el paraguas es un actor secundario; ahora el proyecto de Arantza incluye la realización de al menos cuatro obras en las que el paraguas es la base principal de la composición, la excusa.
«Paraguas I»
José Luis Marqués nuevamente nos deleita con uno de sus paisajes intimistas. Su figuración, que no realismo, es diferente a cuanto acostumbramos a ver: no atiende a modas, da igual qué represente: playa, paisaje, cántaro, retrato…siempre aporta reflexión, son como una novela de misterio donde detrás de lo evidente hay algo más.
«Costa»
Una vez más Rubén Amelibia ha conseguido superarse. Trabaja despacio pero sin parar, nervioso pero concentrado, consciente de que cada toque sobre la tela va a ser trascendental en el devenir de lo que a continuación ha de suceder. Formatos grandes, este último de 160 x 100 cm., materia, resinas, experimentación, mucha experimentación, y simplemente espectacular.
Si sus anteriores realizaciones «Campo de amapolas» y «Campo Riojano» podíamos catalogarlas como excepcionales su obra «La Rioja en Rojos», recién horneada y fresca, ya se une a ese club de «maestras» que suponen un reto complicado y difícil de igualar.
«La Rioja en Rojos»
Matilde Argüeso es una alumna que comenzó en nuestros grupos infantiles de dibujo, desde hace dos años, a pesar de su juventud, forma parte de nuestros grupos de adultos. «Niño con pato» es su último cuadro, acabamos de ponerlo en nuestro escaparate, orgullosos como siempre pero en esta ocasión más si cabe por ser conocedores y testigos de una verdadera evolución: compartiendo espacio con los grandes…se lo merece.
«Niño con pato»
De nuevo tenemos una magnífica obra de Jesús Lozano Parra; lleva la pintura en la sangre, la sufre y la disfruta a la vez, la vive. Trabaja sobre fotografías tomadas por él en sus múltiples viajes, además de La Rioja, él habla con pasión de las costas de Andalucía, sus pueblos, sus paisajes…la pintura te permite analizar y contemplar, detallar lo que un día simplemente viste.
«Atardecer»
José Antonio Herrero ha terminado esta semana un nuevo cuadro que sigue la dinámica de sus anteriores realizaciones. De ejecución y concepto siempre realista José Antonio sabe que tiene técnica más que de sobra para alcanzar su objetivo que no es otro que disfrutar pintando.
«Calle»
Es solo un boceto, ahora está pintando la obra definitiva pero no quiero dejar pasar la oportunidad de referenciarlo por un lado por su desparpajo y originalidad y por otro porque me da pié a hablar acerca de cómo ideamos esta obra. Ana Domínguez como ya hemos comentado en más de una ocasión lleva años basando sus cuadros en fotografías de objetos, bodegones que un amigo construye para ella, pero Ana ha encontrado en las escenas de gente viva una nueva vía de comunicación con la que expresar y comunicar ese punto divertido que ella siempre lleva. Cuatro fotos de una clase, con la gente trabajando le ha servido de excusa para este boceto.
«Jueves por la mañana»
Son varias las obras que están acabadas, o a punto de ello, las que se nos quedan en el tintero en este artículo pero que en breve, en dos o tres semanas reflejaremos en este blog de la Academia. Esperanza Mayoral está dando los últimos toques a una obra en la que ha invertido la práctica totalidad del curso, Elisa Andrés acaba de terminar una obra de gran formato de un jardín de nenúfares, María Suárez con una cuadro que ha estado este mes en nuestro escaparate, Alberto Merchán con dos obras en las que a través de estructuras vegetales transforma perspectivas y composiciones tradicionales…en definitiva: buena remesa de nuevo.
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