FINAL DEL II CURSO DE DIBUJO DEL NATURAL

A lo largo de los meses de mayo y junio hemos disfrutado del II Curso de Dibujo del Natural, si bien en realidad deberíamos de haberlo llamado: “de Pintura del Natural”. Todos los miércoles, de 20 a 22 h. y a lo largo de ocho jornadas de trabajo, un grupo de seis alumnos se han embarcado en una bonita aventura y han realizado, según lo previsto dos cuadros basándose en la posición de nuestra modelo.

Realizamos en primer lugar, en jornada única, un pequeño boceto para estudiar el encaje y el carácter que queríamos dar a nuestra obra. Los bocetos siempre tienen un desparpajo y una impronta que a menudo desaparece en las obras que los artistas consideran más definitivas. Las siguientes sesiones las empleamos en hacer un cuadro de mayor tamaño, un formato aproximado del 20 figura; lógicamente, la idea era llegar a un mayor nivel de acabado que el del boceto. El resultado ha sido el que podemos ver en las fotografías, tan dispar en estilos cómo sorprendente.

Personalmente y como profesor, estoy orgulloso de todos y cada uno de los alumnos, del resultado de su trabajo y, sobre todo, de su valentía afrontando el reto. La tarea empezada era muy complicada, no en vano para todos era la primera vez que se enfrentaban a realizar e interpretar un desnudo del natural aplicando color; algunos de los alumnos habían participado el año pasado en el curso de dibujo del natural, dedicado principalmente a realizar dibujos de “encaje” rápidos de 10 minutos de la modelo.

De todos y cada uno de los trabajos realizados, podemos apreciar cómo el arte, además de técnica, es interpretación, es creatividad. También podemos comprobar cómo la historia del arte influye seguramente inconscientemente en nosotros, salvando las distancias, algunas de nuestras obras nos podrían recordar a Modigliani, a la primera época de Picasso, a… Pero no se trata de comparar, ni siquiera de buscar una calidad profesional, yo busco admiración hacia quién se enfrenta a intimar sin miedo con la realidad y a quién es capaz de reflejar con sus pinceles sinceridad.